Por Arantxa Ramírez.
El 3 de Julio de 1971, el Rey Lagarto se une al conocido “Club de los 27”, hoy lo recordamos a 49 años de su deceso. James Douglas Morrison nació el 8 de diciembre de 1943 en Melbourne, Florida y creció para convertirse en ícono del Rock. Fue fundador del grupo musical “The Doors” junto con Ray Manzarek en 1965.
La banda alcanzó su éxito en la década de los sesenta y aunque se centraban en tocar rock psicodélico, tenían variaciones de blues rock y rock ácido. El plan de formar el conjunto musical nació del poema “Moonlight Drive”. Sus creaciones empezaron a sonar el 4 de enero 1967 con el disco “Light My Fire”, tristemente se desintegraron en 1973.
Jim Morrison comenzó a figurar en el medio y su talento lo hacía destacar; la estrella de rock tenía un manejo sobre las letras que hace que su legado siga presente años después de su muerte.
Su inesperada partida dejó al mundo en luto, pues fue encontrado en la bañera del cuarto de un hotel en Le Marais. Su acta de defunción dice que fue debido a un paro cardiaco, también se dice que a causa de una sobredosis de heroína, sin embargo, por su edad se desatan bastantes teorías, ya que no es el primer artista en el gremio que fallece a esta corta edad.
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En el místico club también podemos encontrar a Brian Jones, Jimi Hendrix, Janis Joplin, Kurt Cobain, Amy Winehouse, entre otros.
La presión de ser una figura pública puede ser uno de los factores en la muerte de los talentosos artistas, podemos encontrar que no sólo tienen en común la edad, sino también siguen siendo vigentes y seguirán en la historia por el trabajo inigualable en que cada uno se ha destacado.
