Twitter se ha convertido en una red social que asemeja un campo de batalla político e ideológico sin reglas ni límites. Las discusiones, que muchas veces parecen más descalificaciones, son un denominador común en las conversaciones que se libran diariamente.
Uno de los últimos debates que ahí se libró, y que tuvo fuerte impacto, se dio cuando el magnate Elon Musk anunció su intención de comprar la compañía. Oferta que fue aceptada con 44 mil millones de dólares en la mesa. Así, Twitter pasaría a formar parte de un empresario disruptivo que sueña con hacer realidad su sueño del turismo espacial.
Sin embargo, la oferta ha quedado congelada luego que Musk descubriera que casi el 20% de las cuentas en Twitter son bots, trolls o una mezcla de ambas. Esto, luego de una mentira piadosa que lanzara el Consejo Directivo actual de la compañía al asegurar que esa cifra no llegaba ni al 5%.
“El acuerdo de Twitter suspendido temporalmente a la espera de detalles que respalden el cálculo de que las cuentas falsas/spam representan menos del 5 % de los usuarios”, tuiteó Musk el pasado 13 de mayo.
Esto ocasionó que las acciones de la red social cayeran un 17.7% este lunes.
Twitter deal temporarily on hold pending details supporting calculation that spam/fake accounts do indeed represent less than 5% of usershttps://t.co/Y2t0QMuuyn
— Elon Musk (@elonmusk) May 13, 2022