Investigadores han descubierto que las personas que tienen insomnio tienen un peor desempeño cognitivo y menor volumen en algunas regiones del cerebro, que se pueden afectar en etapas tempranas del Alzheimer.
Esta investigación abre la puerta a nuevos estudios de la relación entre la neuroinflamación, el sueño y la demencia, al reaccionar con la presencia del insomnio con una elevada vulnerabilidad al Alzheimer; los investigadores analizaron el rendimiento cognitivo de personas con sueño normal y otras con insomnio y los peores resultados fueron producto de las personas que padecen este último.
También descubrieron mediante resonancias magnéticas que la sustancia blanca del cerebro suele variar y esto los llevó a la investigación entre la relación del insomnio y la disposición genética APOE-e4; el gen APOE tiene tres posibles variantes o alelos y el variante e4 tiene un riesgo más elevado de desarrollar Alzheimer.