Por María José Valencia E.
Con más de 150 películas, Mifune es la estrella japonesa que mayor fama ha tenido a nivel mundial. Dos veces premiado como mejor actor en el Festival de Cine de Venecia durante los sesentas, hoy se conmemoran cien años de Toshiro.
Mejor conocido por su papel en la película mexicana ‘Ánimas Trujano’, en el cual destacó y se ganó el cariño de la pantalla, el actor Toshiro Mifune nació en China, sin embargo, adquirió toda su fama en Japón. Llegó al mundo el 1 de Abril de 1920, el carismático actor se entrenó en las artes marciales desde pequeño, siendo el kendo (esgrima) y el kyudo (tiro con arco) de sus favoritas y dentro de las cuales sobresalió.
En realidad si fue un verdadero guerrero, pues acudió a la Segunda Guerra mundial. Fue ahí en donde su amor por el cine nació después de acoger el gusto por la fotografía debido a su padre; gracias a un camarada de guerra que se encontraba envuelto en el medio del cine es que decidió internarse a dicho mundo y buscar trabajo en el medio. Su primera audición como actor en realidad fue un error y un desastre, pues el buscaba ser técnico pero estaba necesitado de trabajo tras finalizar la guerra.
Fue Kurosawa, el director de la compañía, quién quedó impresionado por la intensidad de su inexperta actuación. Vió en él a un talento nato, acompañado de un joven de aspecto rudo y actitud viril, que encajaba perfecto con los demás actores de la época. Mifune comenzó a actuar en 1947 con la idea de no quedarse mucho tiempo frente a la cámara. Sin embargo, tras quince años de hacerlo, se convirtió en la más grande estrella de Toho.
La fama de Mifune lo llevó a recorrer el mundo, recibiendo homenajes. Inclusive el presidente George H. W. Bush lo invitó la su residencia. Pero como toda brillante estrella, su resplandor llegó a su fin tras una vida de excesos, fama y éxito. Todos los amantes del cine de antaño recordaran con cariño a esta estrella de nombre Toshiro Mifune.