Por Aldo M. García Castañeda.
El pasado 17 de abril, Fiona Apple McAfee-Maggart estrenó su nuevo material discográfico: Fetch the Bolt Cutters. Producido en colaboración con Amy Aileen Wood, Sebastian Steinberg y David Garza, para su quinto álbum de estudio, Fiona Apple vuelve después de ocho largos años de ausencia, pues no supimos más desde 2012 con su álbum The Idler Wheel.
Fiona Apple se caracteriza por ser una personalidad incomprendida, con traumas y muchos problemas personales, aunque con un talento peculiar también. Nació en Nueva York en 1977, junto a una familia repleta de artistas. Su madre había sido cantante y su padre actor, además de tener hermanos cantantes e intérpretes; desde muy joven, criada en una familia llena de talento, ya daba indicios de grandeza.
A lo largo de su carrera, Fiona Apple nos ha demostrado tener una voz hipnótica, un sonido acústico con instrumentos en bases de jazz y rock alternativo que seguro te darán ganas de no dejar de escucharlo. En este álbum, Fiona quiere sacar todos esos sentimientos que estuvo guardando y superando; acompañándolos con un sonido crudo lleno de percusiones que conforman a los temas dentro de Fetch The Bolt Cutters. Así nos deja muy en claro su postura: este álbum sería persuasivo y antipático, representándola en las letras de este interesante proyecto.
El 16 de marzo de 2020, la cantautora estadounidense anunció, para la revista The New Yorker, el nombre y la fecha del lanzamiento; detalló que el nombre del álbum es una cita de la serie de televisión británica The Fall, donde el protagonista es un investigador de crímenes sexuales y el pedazo de texto proviene de un caso donde una mujer es torturada.
Fetch the Bolt Cutters es un álbum que comprueba, incluso tras la prolongada ausencia de Fiona, que ella sigue siendo una de las mayores estrellas del negocio musical; para quienes siguen la pista de esta talentosa artista, podrán notar que sigue transmitiendo inconformidad, disposiciones idealistas llenas de desilusión y sentimientos rotos.
Lleno de escenas audaces, en las que Apple narra con vividos detalles, experiencias que normalmente no escuchamos en otras letras. En «Shameika», Fiona recuerda a un compañero de clase repitiendo «Shameika dijo que tenia potencial»; también podremos encontrar temas un tanto cómicos como “Ladies”, un himno en contra de los celos. «¡Ladies! ¡Ladies! ¡Ladies! ¡Ladies!» Fiona grita, implorando a la nueva nueva novia de su expareja no deshacerse de él, pues ella no encajó y nunca fue suyo.
Al parecer, Fiona Apple encontró estabilidad emocional, pero sólo los genios saben cómo funcionan sus cabezas. Disfrutemos de este increíble álbum y esperemos no demore tanto con su siguiente lanzamiento.
