El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) informa que las representaciones de los sectores patronales, de los trabajadores y del gobierno, como resultado de la colaboración y coordinación entre las organizaciones del sector privado, la Secretaría del Trabajo y los representantes de los organismos sindicales, acordaron en el seno de la CONASAMI aumentar en un 22% el salario mínimo para el año 2022: en la Zona Libre de la Frontera Norte el Salario Mínimo General será de $260.34 y en el Resto del País será de $172.87.
La composición del acuerdo tripartito es un 9% de aumento más un Monto Independiente de Recuperación (MIR) en ambas zonas. Este aumento se reflejará en una mejora real en el poder adquisitivo de las y los trabajadores. Con ello, el Salario Mínimo General de la Zona Libre de la Frontera Norte llegará a cubrir el 112% de la Línea de Bienestar Familiar y el Salario Mínimo General del Resto del País llegará a cubrir el 74% de la misma.
Con este acuerdo, el CCE y los organismos que lo integran refrendan su solidaridad y el compromiso de mejorar el ingreso de las y los trabajadores, y superar, en el corto plazo, la Línea de Bienestar Familiar definida por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Es una prioridad para el sector privado brindar soluciones a los retos que enfrenta nuestro país, de cara a la reactivación económica después de la pandemia del Covid-19, que tanto ha afectado la economía de las familias mexicanas.
Bol. Núm. 42 Página 2 de 3 Las organizaciones del sector privado mexicano han sumado esfuerzos con el sector público y el sector obrero para contribuir a la construcción de un México más próspero. Prueba de ello son los sustantivos incrementos al salario mínimo que se han dado en años recientes; la reforma al Sistema de Pensiones, que permitirá a más de 20 millones de mexicanos acceder a una mejor pensión en un menor plazo; así como la reforma en materia de subcontratación, resultado del diálogo y el consenso por la consolidación de un país más justo. De igual manera, el sector privado ha reafirmado su compromiso social, su generosidad y solidaridad con el pueblo de México.
A pesar de la grave crisis, con mucho esfuerzo y responsabilidad, las empresas jamás dejaron de pagar sus impuestos y cumplir con sus obligaciones de seguridad social. Gracias a ello, y a esa recaudación, es que se han mantenido los programas sociales del gobierno, para que los sectores más desprotegidos de México salgan adelante. La economía mexicana inicia una fase de recuperación con altos niveles de inflación que es necesario contener.
El sector privado mexicano ha demostrado, una y otra vez, tener la capacidad de reaccionar a los desafíos coyunturales, y ésta no será la excepción. En este contexto, las empresas continuarán y reforzarán todas las acciones que les permitan lograr el importante objetivo de incrementar la productividad de sus trabajadores.
De manera señalada, el éxito en esta tarea se facilitará con la reactivación de la inversión física, tan necesaria para el crecimiento de la economía y el bienestar de los hogares. Celebramos este acuerdo de incremento de salarios mínimos y reiteramos nuestro compromiso de no dejar desprotegidos a nuestros colaboradores y sus familias. Seguiremos invirtiendo en México y trabajando incansablemente para generar más y mejores empleos, impulsando estrategias que garanticen una mejor calidad de vida para todas y todos los mexicanos.